El Cáncer Social en México, cultura de partidos políticos
Por: Rey Néquiz Villalba
Carlos Salinas de Gortari es más ladrón |
Y, quienes en
lucha encarnizada por posiciones del poder aseguran sus cuotas partidistas
directamente relacionadas con la posibilidad de tener algún tipo de acceso a los
fondos presupuestales, al fin de enriquecer de manera directa e ilícitamente.
Como mensaje de identidad y una premisa de
ética, la demanda cotidiana de los jerarcas de los partidos políticos, se
caracterizan por “no quiero que me des, sólo te pido que me pongas donde hay”.
Y tal eslogan se relaciona con la descomposición social para extender una red
de corrupción para apoderarse de los fondos públicos y realizar negocios fuera
de la ley.
La corrupción más escandalosa que ha ocurrido en
más de 70 años –durante el poder del PRI- se dio en el gobierno de Carlos
Salinas de Gortari, el caso CONASUPO, el control del narcotráfico desde la
presidencia de la República, la venta indiscriminada de empresas del Estado y
los nexos de su hermano con la mafia de la droga, se perfiló como “la esencia
del sistema político y donde se percibió todos lo males del sistema dominado
por un solo partido político (PRI), en la entonces hegemonía del presidente del
a República, después con el PAN durante 12 años en el poder, vuelve con Enrique Peña Nieto, ahora con Andrés Manuel López Obrador y Morena.
También este cáncer, más claro y aguado se da en
el gobierno de Ernesto Zedillo, tal enriquecimiento ilícito solo fue para un
grupo privilegiado del sistema más nefasto de la historia del País. “Y lo peor,
se trató de la creación de fortunas al amparo del poder, ya no de los recursos
públicos, sino de empresas de la nación como la petroquímica, el fobaproa y la
renegociación con intereses de la deuda externa”.
Así mismo, el Distrito Federal convertido en
rehén del PRD, las administración de Cuauhtémoc Cárdenas, Rosario Robles
Berlanga, Andrés Manuel López Obrador, Marcelo Ebrardy Miguel Ángel Mancera fueron un total fracaso, los actos de
corrupción estuvieron a la orden del día y los capos del vicio y la
prostitución gozaron de la protección, la deuda pública creció en un 100 por
ciento y el desvió del erario público se estima que los 45 mil millones de
pesos. Diferencia de 38 mil millones de pesos de los 7 mil que dejó como deuda del
entonces regente priísta, Oscar Espinoza.
Vicente Fox Quezada el peor |
Con la complacencia de los dirigentes nacionales
del otro Partido de la burguesía, Acción Nacional, luego de lograr ascender al
poder con el apoyo de Banca Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), a casi
doce años lo regresa al PRI, en contubernio con priístas y perredistas, la
corrupción como sinónimo de Estado o de una economía pública débil, lo que
significa paradójicamente que este cáncer social es parte del a vida común de
los políticos mexicanos.
Felipe Calderón Hinojosa |
Para el sociólogo González Santos en su ensayo de
“Memorias sobre el Sistema Político Mexicano” asegura que los empresarios son
atrapados con la corrupción gubernamental y, muchos de ellos metidos hasta el
fondo en negocios oscuros con el gobierno, al tiempo de gozar en contratos
oscuros hasta establecer concesiones, permisos, privaciones y hacerse de
recursos públicos para sanear las finanzas de sus negocios privados.
Los priístas corruptos, con la complicidad del
nuevo gobierno federal al través del Morena, y con sus aceptadas frustraciones del
PRD, como viles mercenarios disputan el poder para apoderarse del erario
público, el narcotráfico y las mafias del crimen organizado, mientras millones
de mexicanos cada día se hunde en la pobreza.
En fin la corrupción en México es y seguirá de manera sistemática con Morena, con las mismas estrategias económicas, políticas y socialmente por el mismo rumbo de la descomposición de la Nación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario